Cuatro murales en gradas de espacios públicos de Santiago Atitlán, Sololá, resumen la importancia de la cultura y las tradiciones de ese municipio del occidente del país, situado en la cuenca del Lago de Atitlán y rodeado de volcanes y cerros.
Los artistas plasmaron sus habilidades en varios murales en graderíos de áreas públicas de Santiago Atitlán, Sololá.
En Panajachel también se pintaron 11 murales, trabajo que estuvo a cargo de 60 artistas nacionales que utilizaron técnicas especiales para garantizar la calidad de sus obras, pues el grado de dificultad fue elevado, debido a las superficies donde se hicieron las pinturas.
Los murales, de 34 metros de largo por cuatro de ancho, son parte del Programa “Arte y Turismo, un país con más color” del Instituto Guatemalteco de Turismo (Inguat) y resaltan la belleza del Lago de Atitlán, los volcanes, la naturaleza, los tejidos típicos y las mujeres.
Para los artistas, trabajar en Santiago Atitlán fue un reto, pues nunca lo habían hecho en gradas; sin embargo, lo asumieron. “Al principio todos estábamos nerviosos y con la incertidumbre de cómo quedaría la imagen en las gradas, pero con dedicación y arte se lograron hermosas imágenes”, comentó Maritza Ávila, coordinadora del programa.
En los murales se resalta la imagen de Concepción Ramírez, cuyo rostro aparece en la moneda de 25 centavos, quien fue la inspiración del muralista Francisco Pérez. “Ella fue mi inspiración para dibujar el boceto, enfocándome en la belleza de la mujer indígena y su tocoyal, que es una cinta que las mujeres se enrollan en la cabeza; además, tiene mucha relación con el calendario Maya”, expresó Pérez.
El grafitero y artista plástico, André Ortiz, conocido como “Crout”, inició el proyecto en el 2017. “Soy de la camada de grafiteros del Inguat”, expresó Ortiz, quien añadió que no fue fácil empezar, pues no contaba con insumos, hasta que dicha entidad adoptó el proyecto.
“A nosotros nos tocó crear nuestro mural junto a un tragante y debíamos representar al Kukulcán, la serpiente emplumada, que es conocida en Guatemala como un Nahual. Además, plasmamos un colibrí y pintamos maíz blanco, rojo, amarillo y negro, en representación de los cuatro puntos cardinales y las cuatro naciones mayas”, dijo Ortiz.
